En el ámbito de la criminología, es esencial entender tanto el delito como la desviación social. Estos conceptos forman la base del estudio criminológico y nos permiten analizar las conductas que desafían las normas sociales y las consecuencias legales que estas acciones pueden conllevar.
El Delito en el Código Penal:
El Código Penal, en su Artículo 10, define los delitos como acciones y omisiones que pueden ser dolosas o imprudentes y que están sujetas a sanciones legales. Los delitos se clasifican en distintas categorías según su gravedad, abarcando desde delitos graves hasta delitos menos graves y leves.
Sin embargo, la criminología no se limita únicamente al estudio de los delitos penales, sino que también aborda las conductas desviadas que se apartan de las normas sociales establecidas y generan desaprobación en la sociedad en general. No todas las conductas desviadas son consideradas delitos según el código penal, pero algunas están tipificadas como ilegales y sujetas a sanciones legales. La comprensión de las conductas desviadas es crucial para identificar sus causas y prevenir su evolución hacia delitos más graves.
El Delincuente:
En el pasado, la criminología tradicional se centraba principalmente en el estudio del delincuente. Sin embargo, la criminología moderna ha ampliado su enfoque para incluir la investigación de la conducta delictiva, las víctimas y el sistema de control social.
Métodos de Control y su Evaluación:
Los métodos de control se analizan desde dos perspectivas fundamentales: su eficacia en la prevención y su conformidad con los principios de justicia y derechos humanos.
- Métodos de Control Formal: Estos métodos son ejercidos por individuos con autoridad legal, como jueces y fuerzas del orden. Tienen la capacidad de hacer cumplir la ley y tomar medidas coercitivas contra los infractores.
- Métodos de Control Informal: En contraste, los métodos de control informal son ejercidos por personas que pueden no tener autoridad legal, pero que influyen en las aspiraciones y el comportamiento de otros. Esto ocurre en contextos comunitarios y educativos, donde la conformidad social juega un papel importante.
Víctimas y su Importancia:
Las víctimas son personas que experimentan directa o indirectamente las consecuencias de un delito. Aunque no todos los delitos involucran víctimas, la criminología presta una atención especial a este elemento por diversas razones:
- Prevenir futuras victimizaciones.
- Abordar las necesidades de las víctimas.
- Facilitar la reparación del daño causado a las víctimas.
- Evitar que las víctimas sean revictimizadas o sufran más daño.
El campo de estudio de la criminología abarca estos cuatro componentes esenciales, proporcionando una comprensión completa de la dinámica delictiva y las estrategias para su prevención y control en la sociedad.
