La teoría del etiquetado, surgida en los años 60 en los Estados Unidos y desarrollada por destacados criminólogos como Lemert, Erikson, Kitsuse, Becker y Schur, revolucionó el discurso criminológico al introducir una nueva perspectiva sobre la delincuencia y la desviación.
El Nuevo Concepto de Delincuencia:
Esta teoría identifica un nuevo tipo de delincuente que no se ajusta a la imagen tradicional del delincuente. Esto plantea la necesidad de comprender que lo que se considera desviado para algunos puede no serlo para otros. En este paradigma, se destaca la importancia de estudiar cómo la sociedad interpreta un comportamiento como desviado y cómo reacciona ante ello.
Reacciones Sociales y Etiquetas:
La teoría del etiquetado sostiene que no existen comportamientos intrínsecamente «desviados». En cambio, la desviación se atribuye en función de la reacción social a dicho comportamiento. Los teóricos del etiquetado se centran en los efectos que experimenta una persona etiquetada como desviada, investigando si esta etiqueta conduce a una nueva identidad y, a su vez, facilita la continuidad de su comportamiento desviado.
No Solo Criminalización:
Es importante destacar que los teóricos del etiquetado no se enfocan únicamente en la criminalización de conductas desviadas; también analizan las reacciones sociales negativas que estas conductas generan. Esto plantea preguntas esenciales sobre la creación y aplicación de normas penales:
- ¿Qué comportamientos se consideran delitos y por qué?
- ¿A qué comportamientos se aplican las normas penales?
- ¿Cuáles son las consecuencias de aplicar una pena?
Principales Conceptos Teóricos:
La teoría del etiquetado se basa en dos tradiciones principales:
- El poder económico influye en quién es etiquetado y por qué.
- La experiencia de ser etiquetado es crucial en la creación de una identidad y un estilo de vida más desviados.
Esta perspectiva ha tenido un impacto significativo en tres áreas de estudio:
- El proceso de definición del delito y el delincuente.
- La asunción de una identidad de delincuente después de ser etiquetado.
- Las estadísticas del delito.
Consecuencias y Política Criminal:
La teoría del etiquetado critica el sistema penal por contribuir a la formación de la identidad del delincuente. El proceso penal somete a la persona a un ciclo de visibilidad, diferenciación y estigmatización que puede llevar a la asunción de una nueva identidad delictiva y perpetuar su carrera delictiva.
Los defensores del enfoque de etiquetado abogan por políticas criminales que eviten que las personas sean etiquetadas como desviadas, especialmente los jóvenes. Esto ha llevado al movimiento de la diversión, que promueve alternativas al sistema procesal formal, como servicios sociales juveniles o instituciones comunitarias. Además, se ha propuesto la implementación de penas alternativas como una forma de control penal.
En resumen, la teoría del etiquetado en la criminología desafía las concepciones tradicionales de la delincuencia y la desviación al poner énfasis en las reacciones sociales y las etiquetas que se aplican a las personas. Esto tiene importantes implicaciones para la política criminal y la búsqueda de una justicia más equitativa.
